sábado, 18 de abril de 2015

Debate - Sagas de mil libros


¿Habéis leído alguna vez un libro que os ha encantado, en el que habéis devorado los tres, cuatro, cinco primeros, y el sexto ya se os hacía forzado, aburrido y sin trama? Yo sí, y varias veces. No entiendo a las personas que son capaces de seguir la trama de una historia por veinte libros sin desesperarse. Es decir, o muy grande tiene que ser la trama para dar a basto, o muy forzada tiene que estar, y me decanto, en la mayoría de los casos, más por la primera posibilidad que por la segunda.

Supongo que no os he dicho que me encanta escribir, pero hace un tiempo terminé una historia en Wattpad que se hizo bastante famosa y la gente me pedía que hiciera segunda parte. Bueno, pensé, si le doy a la gente lo que quiere, quizás me haga más famosa.

Ingenuas palabras de una idiota.

Estiré la trama todo lo que pude, y el final fue tan malo que estoy planeando borrar la historia para que la gente no piense que doy pena. Yo escribo decente. Todo lo decente que puedo escribir a mi edad, y probablemente más debido a lo que le dedico a esto. Sin embargo, hasta yo admito que estirar esa historia acabó con ella. Le cogí tanto asco que ya solo sirve para escupirle encima. Y tengo más historias en Wattpad. Historias de las que estoy orgullosa. Y una de ellas está terminada y me aseguré de dejar la suficiente trama como para hacer una segunda parte.

¿Pero qué pasa si comienzo a estirar, y estirar, y estirar la trama? No comprendo a la gente que le gusta eso. Vale que puede encantarte el mundo, los personajes y lo que sea, pero, hay que aprender a darse cuenta de que toda historia tiene su fin. Incluso La historia interminable lo tiene, y no hay segunda parte.

¿Que si estoy en contra de que un libro tenga segunda parte? ¡No! Claro que no. Estoy en contra de que haya segunda parte si no hay más trama para hacer una segunda parte. Y bueno, esas sagas que llegan a los cuarenta libros... ¿quién se lee tanto? Es que hasta a mí, lectora empedernida, me da una flojera tremenda. Y seguramente en esas historias, el primer libro comienza con un personaje normal y en el último termina con otro personaje transformado en zombie/vampiro que vive en Marte. 

Conclusión: Hay que dejar ir a las historias. Sé que se les coge cariño y se quiere más, pero... ¡no pueden durar para siempre! Al final solo se les coge asco.


¿Estáis de acuerdo conmigo? ¿Tenéis otra opinión?